Los dos extremos de una misma ciudad

Nou Barris, el distrito más afectado por los desahucios, es también, como era de esperar, el más pobre de Barcelona. Según el Departamento de Estadística del Ayuntamiento de Barcelona, Nou Barris repite un año más como el area con la renta familiar media más baja de la ciudad.

Las cifras de dicho Departamento no solo muestran este hecho, sino que además afirman que la brecha social entre los barrios más ricos y los más precarios, no deja de aumentar, año tras año.

  Gráfico realizado por Francesca Pani

 

En el gráfico que tenemos a continuación, se puede ver como en todos los barrios de Nou Barris, la renta familiar está entre un 25% y un 66% por debajo de la media de Barcelona (100%), mientras que en barrios como Pedralbes, Les Tres Torres, o Sant Gervasi, están por encima del 150% de media, tal y como indica el Departamento de Estadística.

De aquí se puede deducir que, por ejemplo, una familia de Pedralbes dispone de siete veces más renta que una de Can Peguera, el barrio más pobre de todos, también conocido como el de las "casas baratas", en el que en sus inicios se alojaba a los trabajadores de la Exposición de 1929.
Pero no solo eso, según las cifras del Departamento de Estadística, los barrios con rentas más bajas empeoran año tras año; mientras que en la zona alta, los ingresos aumentan considerablemente. Así, en 2008, Pedralbes contaba con una renta media de un 194% (actualmente un 241) y Can Peguera de un 52% (hoy es solo de un 34%).

También apreciamos que, de los diez barrios con una renta familiar media más baja, 6 de ellos, pertenecen a Nou Barris. Trinitat Nova, Ciutat Meridiana, Vallbona, Les Roquetes, Verdun y el Turó de Peira son, con diferencia, los más afectados. Sólo Canyelles y Vilapicina-Torre Llobeta se distancían minimamente, aunque no dejan de estar en los puestos más bajos, según las cifras del Departamento de Estadística.

Estas notables diferencias, entre un extremo y el otro de la ciudad, no sólo afectan al nivel económico de sus residentes. El reciente estudio demuestra que, si en toda Barcelona se ha conseguido reducir la mortalidad prematura, en Nou Barris, esta tendencia ha sufrido una evolución negativa, a partir de 2010, año en que la crisis empezó a afectar a los ciudadanos.