El sindicato de UGT de los bomberos de la Generalitat de Cataluña anunció, el pasado 19 de febrero, que a partir de ahora no colaboraría en el desahucio de ninguna familia mas y, sólo "realizaría la apertura de viviendas en casos de emergencia, como marca la ley".
Tras este comunicado, el cuerpo catalán se suma a la reivindicación iniciada, hace unos días, por los bomberos de A Coruña, los cuales se negaron a participar en el desahucio de una mujer de 85 años, a la que querían desalojar por retrasarse, un mes, en el pago del alquiler de su piso.
Finalmente, el desahucio no se llevó a cabo, gracias a la presión de las más de 200 personas que acudieron al acto, convocadas por el colectivo "Stop Desahucios", pero también gracias a la ayuda de los bomberos gallegos que se sumaron a las protestas.
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